Aceptarse a si misma
La Autoaceptación o hecho de aceptarse a una misma de manera plena, con sus cualidades y carencias, es algo imprescindible a la hora de poder desarrollar una autoestima equilibrada. Aceptarse no siempre es una tarea fácil. Existen multitud de aspectos de nuestro físico, nuestra personalidad ó nuestro pasado que nos negamos a considerar ó intentamos ocultarnos a nosotras mismas y a los demás.
Aceptarse a una misma no significa conformarse y convertirse en un ser pasivo. Al contrario, a la hora de realizar cambios en las partes de nuestra persona que no nos gusten, es necesario que aceptemos en un primer momento de forma realista esas carencias.
La tarea de aprender a aceptarse requiere afrontar nuestros sentimientos, combatir nuestros miedos, aceptar nuestro físico y aprender a convivir con los aspectos que no podamos modificar. Conseguirlo hará que nos sintamos más seguras de nosotras mismas, que afrontemos la vida de forma más realista y que podamos utilizar en mejorar la energía que antes utilizábamos para esconder nuestros límites a nosotras mismas y a los demás. No aceptarnos puede tener serias consecuencias como una autoestima baja, sentimientos de culpabilidad e inseguridad ó incluso trastornos psicológicos como ansiedad, depresión ó trastornos alimentarios.
Aceptarse a una misma es esencial para tener una alta autoestima y poder realizar los cambios que consideremos necesarios. Quizá se puede pensar que es mejor no aceptar ciertas características de la personalidad a la hora de querer cambiarlas pero no es así. La aceptación de esas características negativas nos ayudará a ser más conscientes de su existencia, sus causas, cómo influyen en nuestra vida...
Además, al aceptarlas dejaremos de malgastar energía en negarlas o esconderlas, nos sentiremos menos presionadas y ansiosas y podremos usar esa energía en realizar verdaderos cambios.